Cirugía de senos: Agrandar el busto conlleva una serie de peligros que siempre están latentes,

”Informarnos es protegernos”

El Magazín de Merlo: Más allá de los avances tecnológicos, existen riesgos que se deben reconocer antes de tomar esa decisión: la de someterse a un implante mamario.

Senos. Para un frío e impasible profesional de las letras, es un término no pasa de ser una simple palabra de tan solo dos sílabas, escasas cinco letras y vulgar significado.

Pero en cambio para una mujer, especialmente una moderna, esa palabra adquiere, no uno, sino un conjunto de valores: puede significar autoestima, belleza, éxito. También quirófano y peligro o, xenofobia: un odio y rechazo al extranjero, que en este caso no es un integrante de una comunidad extranjera, claro está, sino un cuerpo extraño colocado en el pecho femenino.

Más allá de los avances tecnológicos, existen riesgos que se deben reconocer antes de tomar esa decisión: la de someterse a un implante mamario.

Proponemos, desde aquí, para todas las mujeres que navegan entre la senos-fobia, es decir el miedo a la operación de senos, y la necesidad, por otro lado de agrandar su busto, una serie de peligros que siempre están latentes: porque informarse es protegerse.

Posibles secuelas derivadas de la colocación de un implante

* Contractura capsular: sucede cuando la prótesis se introduce en el organismo y, en respuesta, el organismo forma cicatriz alrededor de la misma.

 * Rotura del implante: problema común que puede derivar de un golpe o un desgaste. Puede traer consecuencias fatales.

* Rechazo: a menudo la piel expulsa las prótesis, es decir, produce un rechazo y no las acepta.

* Pérdida de sensibilidad: ciertas mujeres experimentan, en mayor o menor medida, una pérdida en la sensibilidad de la zona. A menudo, extrema.