Cuenta la “leyenda” que hace unos 10 años la
artista en talla de madera Mary Gonzales de El Triunfo, Lincoln, Buenos Aires,
disfrutaba de uno de sus viajes de exposición y venta de artesanías, cuando
caminado a orillas del imponente Parana
le impactaron la belleza y tamaño de
los Timbo, que por ese momento estaban dando sus semillas, recogió algunas
pensando que bien se vería tamaña belleza natural en su casa, en la plaza del
pueblo o en el parque del poeta Miguel Ángel F.G.
Lo cierto es que lo trasplante con todo el
cariño de que soy posible, y el resultado es hoy unos 10 años después, un Timbo
muy sano, de unos 20
metros de altura, hasta ahora no dio semillas. Según he
podido investigar en Argentina se han hallado Timbo de más de 200 años. Están presentes en todo el norte de nuestro
país y fue llevado al resto del país como árbol ornamental, quizás lo tenemos
en nuestra plaza y no lo sabemos.
Según Mary, estos
árboles crecen sobre el Parana, son terriblemente grandes tienen una excelente
madera con la cual nuestros antepasados hacían sus canoas y su semilla la
llaman oreja de negro por su similitud a la oreja de un hombre de color, y adentro
esta semilla/fruto tiene algo blanco similar al jabón, dicen que con eso las
mujeres originarias lavaban sus ropas a orillas del Parana.
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