Las vacaciones y los cuatriciclos mortales.

En los últimos 17 años, murieron al menos 32 personas en siniestros viales con cuatriciclos, ocurridos mayoritariamente en la Costa Atlántica bonaerense. Desde el Observatorio de Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes (NNyA), a cargo del Defensor del Pueblo Adjunto de la Provincia, Walter Martello, elaboraron un informe donde se alerta sobre la cantidad de siniestros que se producen cada año cuando menores de edad operan estos vehículos, así como sobre la nueva normativa referida a cuatriciclos que rige a partir de este verano. Preocupación por el impacto del recorte de $61 millones aplicado en el presupuesto de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV).

Niño de 7 años muere por accidente de cuatriciclo en Villa Gesel.

Pinamar, Villa Gesell, Monte Hermoso y otros municipios de la provincia de Buenos Aires, sancionaron ordenanzas de corredores seguros, ya que entre el año 2001 y el año 2018 se registraron al menos 32 personas muertas al operar cuatriciclos en zonas turísticas durante vacaciones o feriados. De los 32 muertos, 21 eran menores de edad. De esas muertes, 18 se produjeron en territorio bonaerense en la zona de la costa atlántica. Y de esas 18 muertes, 12 eran de menores de edad (cuyas edades comprendían entre 4 y 16 años). Cabe destacar que, los siniestros viales, es la principal causa de muerte de niños, niñas, adolescentes y adultos jóvenes en la Argentina.

 

Los Cuatriciclos, Quads, ATV (All TerrainVehicle) o UTV (Utility Terrain Vehicle) tienen un atractivo innegable: parecen ser “fáciles de manejar” y divertidos. Quienes los utilizan por primera vez sienten una falsa sensación de estabilidad (por sus ruedas anchas y bien plantadas en el suelo) sin embargo, estos vehículos poseen un centro de gravedad alto que los hace proclive a vuelcos al efectuar giros cerrados. 

Otras de las características principales son: su alta relación peso/potencia (que les confiere rápidas aceleraciones y velocidad); la falta de diferencial en las ruedas en muchos modelos (lo que ocasiona derrapes al girar); la falta de una carrocería que proteja al piloto; la falta de medidas de seguridad pasivas (cinturones de seguridad, luces, luces de giro, bocina, muchos ni siquiera tiene espejo retrovisor, etc). 

Estas características, sumado a la “sensación distendida” propia de las vacaciones, más las dificultades propias de la orografía donde circulan (principalmente médanos, donde la visibilidad es reducida), son la combinación perfecta para que sucedan accidentes.

En definitiva, el comportamiento dinámico de estos vehículos, dadas sus características estructurales, resulta peligroso para quienes no están habituados a su uso. Máxime si se trata de menores de edad (lo cual está legalmente prohibido) y si circulan en zonas con presencia de turistas y/o de otros vehículos.

“El mes pasado, el Ministerio de Transporte lanzó una campaña para controlar, de forma coordinada con municipios y la Provincia, que se cumpla con la nueva normativa de tránsito que establece que los cuatriciclos tendrán que respetar las zonas de circulación seguras, determinadas y señalizadas por cada municipio. Se trata de una acción positiva, aunque nos genera preocupación lo que está sucediendo con el presupuesto destinado a la seguridad vial”, explicó Martello. 

 

En ese sentido, el Defensor del Pueblo Adjunto bonaerense explicó que, según se desprende de los últimos datos nacionales del Ministerio de Hacienda, el presupuesto definitivo de la ANSV del año pasado fue de $838,21 millones, lo que significó un recorte de $61 millones respecto a lo que se había establecido a principios de año. A su vez, teniendo en cuenta los $838 millones que debían estar disponible, al 24 de diciembre, solo se habían devengado $674 millones”. 

“Según el Presupuesto 2019, la Agencia recibirá este año apenas un 8% de aumento, muy por debajo de los índices de inflación. Más allá de que las jurisdicciones locales son quienes tienen la mayor responsabilidad, al ser la autoridad de aplicación y comprobación de la Ley de Tránsito, resulta preocupante que la seguridad vial a nivel nacional, en un país que tiene alrededor de 7000 muertos en accidentes de tránsito por año, sea considerada una variable de ajuste”, remarcó Martello.