El próximo lunes 28 será un día clave en La Pampa para el sector agropecuario. Ese día
se cumplirán los 270 días de plazo que
la Subsecretaría de Ambiente de la provincia estableció para la puesta en funcionamiento
del modelo de gestión de envases vacíos
de la Fundación Campo Limpio, y que todavía no tuvo grandes
avances a nivel local.
La autoridad
de aplicación de la Ley 27.279 de
Gestión de Envases Vacíos de Fitosanitarios comprobó la falta de progreso en la
construcción de los tres Centros de Acopio
Transitorio (CAT) que implica el sistema en el marco de
una recorrida por las obras, y es por eso que ya se habla de la posibilidad de
que se prohíba la comercialización de
fitosanitarios en La Pampa.
sola idea de que la
medida se cumpla preocupa a las
distribuidoras de insumos, que ya se expresaron este viernes a
través de la federación que las nuclea, FeDIA. “Esta decisión afectará la actividad de las empresas distribuidoras
de agroinsumos, que en su mayoría son agronomías y
cooperativas de pequeña y mediana envergadura, y podría
inclusive dejar en duda los planes productivos de
cientos de agricultores”, salió a advertir la
organización.
En ese
sentido, las empresas remarcaron que la principal
responsabilidad en la implementación de un sistema de
gestión de envases vacíos de fitosanitarios “recae en los
registrantes”, es decir, los laboratorios que
formulan los productos, tanto nacionales como trasnacionales.
“Son estas empresas, representadas por la
Fundación Campo Limpio, las que deben proponer soluciones que
incluyan inversiones y acuerdos con municipios y
privados para la construcción y puesta en funcionamiento
de los CATs”, sostuvo FeDIA.
“Pese a que la ley es muy precisa sobre la
responsabilidad de cada eslabón, han surgido desde su
aprobación interpretaciones confusas de parte de las
autoridades de aplicación provinciales e intentos de parte de las compañías de
trasladar su responsabilidad al canal de distribución”, denunció la federación,
y le pidió al gobierno de La Pampa y a los
registrantes “lograr un acuerdo que permita alcanzar una
solución definitiva al problema”, sin alterar la actividad comercial de los
distribuidores de agroinsumos.
La situación se da en un contexto
particular de la provincia. A principios de enero, una agrupación ambientalista le exigió al
gobernador Sergio Ziliotto la prohibición de aplicar glifosato en todo el
territorio pampeano. Semanas después, aparecieron bidones de agroquímicos arrojados en el
antiguo basural de Macachín y la Municipalidad hizo una denuncia en sus redes
sociales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario