La
producción de pistacho crece en Argentina, desde Cuyo, servido en helados, pero
también utilizado en repostería y un creciente consumo como snack. Por qué los
cambios en el consumo de vinos es un impulso para este fruto seco.
Los especialistas
la describen como una planta “rústica” capaz de soportar y seguir brindando
buenos frutos en condiciones extremas de temperatura, sea frío o calor. Los
consumidores, agradecen su presencia en distintas ramas de la gastronomía. El pistacho ya es un cultivo afianzado en el
agro argentino.
“El pistacho tiene una situación muy
particular, porque ha llegado a San Juan y ha llegado
también a Mendoza. Está logrando imponerse en otras provincias como La Pampa,
Neuquén y Río Negro,
porque con el nuevo paradigma del cambio climático que tenemos, en áreas que
antes eran aptas para cultivar olivos o vid, y que hoy ya no lo son, los frutos secos
son una opción allí”,
comentó en una charla con Infocampo Martín Zanetti, CEO de Vivero
Productora.
En un encuentro durante la última edición de la Sitevinitech en Mendoza, Zanetti expuso que el pistacho en ese contexto
“necesita condiciones de climas muy extremos y altas temperaturas de verano en zonas donde haya
cerca de 40°, pero también
de mucho frío en zonas donde pueden hacer casi 10° bajo cero”.
“El pistacho
va muy bien allí y no tiene problema. Se trata de lugares donde otros
cultivos no pueden desarrollarse, pero el pistacho tiene una posibilidad. Está
logrando una adaptación”, comentó.
EL PISTACHO, POR DETRÁS DE LAS UVAS
Zanetti analizó también la extensión que supo tener la vitivinicultura
no solo en Mendoza, sino también en distintas zonas del país. Según su
estimación, la provincia
cuyana llegó a tener unas 250.000 hectáreas de producción de uvas para
vinificar.
“Hoy son 190.000 en la provincia. Argentina en su conjunto con todos los oasis productivos llegó a tener
300.000 hectáreas y hoy en total son 200.000. Y toda esa zona que se redujo de viñedos responde a dos situaciones:
al cambio climático, pero también responde a un cambio de consumo en el mundo”,
expresó Zanetti.
Entre algunos cambios de consumo que se perciben está el de la reducción
en el consumo de vino.
“Ya no se
consume vino al mediodía, no se consume vino todos los días, sino el fin de
semana”, explicó. En ese contexto se da el crecimiento de las áreas cultivables
con frutos secos.
“Y si bien
antes de esos frutos secos estaban compuestos por almendras y nueces, hoy el
pistacho pasa a ser una alternativa más. Incluso variedades que no son tan
necesarias a nivel comercial se van erradicando. Nuestros viveros
han puesto a punto la producción de pistachos in vitro, que generan una selección clonal y
una uniformidad clonal y vigor muy superior”, expresó.
Y señaló: “Hoy la fruta del
pistacho está demandada como snack para consumo directo, por la heladerías y
por la repostería,
pero crece muchísimo la demanda como snack directo”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario