viernes, 1 de noviembre de 2024

PREOCUPANTE: En Europa, productores y sindicatos de la alimentación se mantienen en contra del acuerdo con el Mercosur.

 

“Es un hecho extremadamente preocupante para la comunidad agrícola europea”, plantearon un grupo de entidades del agro y sindicatos. Buscan presionar en la previa al G20 en Rio de Janeiro.



Una relación con fricciones y final incierto. En paralelo a la preocupación por el paso de una mortífera inundacion por el sur de España y los daños agropecuarios, el acuerdo entre la Unión Europea y el Mercosur vuelve por estas horas a estar en el centro de los debates.

Los sindicatos europeos de trabajadores agroalimentarios y el sector agrario rechazan enérgicamente la conclusión del acuerdo comercial con Mercosur”, aseguraron desde ASAJA, la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores.

Según plantearon en un comunicado, la intención de la Comisión Europea es “ultimar el acuerdo con Mercosur en la cumbre del G20 que se celebrará en Río de Janeiro los días 18 y 19 de noviembre”.



En el texto, informaron que el Copa Cogeca, el CEJA, la EFFAT y el GEOPA, que representan a los agricultores y a sus cooperativas, a los sindicatos de trabajadores y a los empresarios del sector agrícola europeo, “se oponen firmemente a la ratificación de este acuerdo”. 

“El resultado global de las negociaciones del ALC UE-Mercosur expondría al sector agroalimentario de la UE a una competencia desleal con consecuencias negativas para los medios de vida, los salarios, las condiciones de trabajo y el empleo de los agricultores”, indicaron.



Además, expresaron que “el actual borrador no contribuye a elevar los estándares sociales y medioambientales en los países del Mercosur y aumenta el riesgo de ruptura de las cadenas de valor regionales en esos países”. 

“Los trabajadores agrícolas y los agricultores no pueden aceptar que el sector agroalimentario sea tratado como moneda de cambio para promover la exportación de otras mercancías, sin tener en cuenta las graves repercusiones económicas, sociales y medioambientales que tales decisiones tienen en el sector primario”, puntualizaron. 



Los productores y gremios de la alimentación entienden que aunque la UE se comprometió a alcanzar objetivos medioambientales ambiciosos, “el acuerdo de Mercosur incluso con el protocolo adicional no incluirá salvaguardias sólidas, vinculantes y aplicables para garantizar la protección del medio ambiente y el respeto de los derechos humanos y laborales”.

“Esta falta de coherencia pone en peligro el objetivo general de la Unión de fomentar una transición hacia sistemas alimentarios más sostenibles”, indicaron. 

Expresaron también que “la región del Mercosur ya ocupa una posición preeminente entre los proveedores del mercado de la UE en muchos productos básicos”

En ese marco entienden que hay puntos de mayor riesgo para los intereses locales: las importaciones agrícolas, carne bovina, las aves de corral y el azúcar.

“Expondrían al sector agroalimentario de la UE a una competencia desleal adicional. Al mismo tiempo, será difícil aumentar las exportaciones de productos de la UE a los países del Mercosur debido a la recesión económica de algunos de estos países”, remarcaron.

“La experiencia demuestra que, en ausencia de una fuerte demanda de los consumidores, es poco probable que el comercio actúe como motor independiente del crecimiento”, graficaron y sumaron el pedido de que “los gobiernos nacionales que escuchen a los agricultores y trabajadores agrícolas de Europa y detengan las negociaciones del acuerdo comercial UE-Mercosur”.

“Los agricultores y los trabajadores del campo garantizan que todos los días haya alimentos en nuestras mesas. Merecen reconocimiento y respeto, no dumping social y competencia desleal”, cerraron.

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario