lunes, 29 de mayo de 2023

MANOS MÁGICAS: El artesano de las máquinas agrícolas: las replica de manera exacta en miniatura.

 

De oficio metalúrgico, Pablo Bigo sorprende a los amantes de la maquinaria con sus creaciones de hierro a muy pequeña escala. "No discriminamos modelos ni marcas, y buscamos que sea lo más parecido posible a la realidad", relata.




Nacido en Rio Cuarto, provincia de Córdoba, es reconocido por sus excelentes trabajos en miniaturas de campo. Es que Pablo Bigo se destaca por la perfección al pasar de la maquinaria agrícola real a una creación idéntica a estala menor.

“Siempre nos piden trabajos de diferentes partes del país. No discriminamos modelos, marcas ni implemento a diseñar.




Buscamos por todos los medios que sea lo más parecido posible a la realidad”, sostiene el soldador, que está casado con Noelia y tiene un hijo, al que intenta todos los días transmitirle su huella imaginativa: Juan Bautista.

Sus más recientes creaciones, por pedido concreto de amantes de las maquinas, son cosechadoras, tractores, tolvas, pulverizadoras y hasta implementos de laboreo que generan curiosidad.




“Cuando en lo que a uno le gusta las cosas se realizan con amor en muy probable que estemos cerca de la perfección”, destaca Bigo.

Por ejemplo, comenta que desde muy pequeño intentaba imitar maquinarias agrícolas en madera, lo que ya evidenciaba su pasión por las creaciones a escala, principalmente de maquinarias, camiones y automóviles.

SIEMPRE CERCA DEL CAMPO:



De familia arraigada al sector agropecuario, Bigo conoce mucho sobre maquinarias y se concentra en cada trabajo para conquistar un diseño muy parecido al real.

“Tengo mucha demanda de maquinarias antiguas pero también modernas. Si bien no es mi principal fuente de ingresos, esta actividad me ayuda económicamente en mis tiempos libres”, menciona el artesano a Infocampo.

Además, confiesa que los implementos agrícolas son una pasión en su vida. Actualmente es propietario de un taller metalúrgico familiar donde repara implementos para el agro. “Eso me ayudó a conocer muchas características esenciales que debo replicar a escala real en cada uno de mis diseños”, asegura el herrero.

Bigo muestra entusiasmo al exhibir alguna de sus obras. “Para los diseños se utilizan materiales simples que se pueden conseguir en cualquier ferretería de barrio: madera, metales y plásticos”, expresa con humildad.

Sin embargo, sabe que su rol de imaginación es fundamental para unir esas piezas sencillas y lograr una pequeña máquina que trae consigo con un alto valor sentimental para quien se la encarga.

Soy consciente del valor que una maquinaria agrícola tiene para el hombre de campo. Hay quienes son fanáticos de una marca y otros que añoran que les fabrique la máquina con la que trabajaban sus abuelos en otros tiempos. Es una gran responsabilidad para mí lograr satisfacer esa demanda”, destaca el entrevistado.

 UN DISEÑO PARA TODA LA VIDA

Las piezas son soldadas o ensambladas, según corresponda, y tienen una durabilidad eterna. “Cada réplica lleva mucho tiempo y dedicación. Debo construir los detalles que caracteriza a cada pieza para hacerlo más real”, comentó.

Por otra parte, destaca que se considera “un artesano de la maquinaria agrícola”, debido a que cada creación es elaborada con piezas únicas. “Lo hago de forma artesanal; con mis propias manos y despertando el ingenio y la imaginación”, insistió.

No hay dudas que los trabajos que Bigo desarrolló durante su camino como “artesano metalúrgico del campo”, fue escalando en el corazón de los amantes de las maquinarias agrícolas. Sus “mini-implementos”, llegaron para emocionar a grandes y chicos. Además, no hay un abuelo al cual no se le pianta un lagrimón al tener una creación en frente.

Su prolijidad y delicadeza lo llevaron a exportar diseños a Paraguay y Bolivia en una oportunidad. “Nunca imaginé que podría trascender las fronteras. Lo cierto es que lo hago con mucha pasión y responsabilidad”, vaticinó a modo de conclusión.

No hay comentarios:

Publicar un comentario