La protección de la
naturaleza y del medio ambiente es una de las tareas más importantes que
tenemos que cumplir si queremos conservar un planeta habitable y nuestra propia
salud y bienestar como especie.
Sin embargo, más
allá de estos aspectos tan fundamentales, está demostrado que, cuando pasamos
tiempo en la naturaleza, nuestro cuerpo se siente beneficiado, lo que nos ayuda
a mejorar nuestra salud tanto física como mental.
De hecho, los
expertos recomiendan pasar tiempo en contacto con la naturaleza, ya que, las
actividades que pasamos en el entorno natural, tienen ventajas directas y
cuantificables en nuestro organismo. Si quieres conocer cuáles son los beneficios de estar en contacto con la naturaleza sigue leyendo Ecología Verde y te lo contamos.
Mayor cantidad y mejor calidad de oxígeno
Uno de los primeros beneficios que
vamos a disfrutar al pasar más tiempo en la naturaleza es que vamos a disfrutar
de una cantidad
y calidad de oxígeno mayores. El oxígeno es uno de los gases
que compone el aire y, en concreto, se trata del gas que los animales y los
seres humanos necesitamos para vivir, ya que es el gas que respiramos y de
donde obtenemos la energía que nos mantiene con vida. Este gas es producido por
las plantas, por lo que en lugares como los bosques o el mar su concentración
es mucho mayor.
Además, también hay que tener en
cuenta que, en la naturaleza, la calidad de este oxígeno es mayor, ya que en
los núcleos urbanos es donde se concentra la mayor cantidad de contaminación
del aire. Esto hace que la calidad del oxígeno, y del aire en general, que
respiramos en la naturaleza sea mucho mejor. Por ello, pasar largas temporadas
en contacto con la naturaleza, o simplemente escaparse un día a la montaña, nos
ayudará a limpiar
nuestros pulmones de la polución de las grandes urbes,
especialmente si realizamos ejercicios aeróbicos en la naturaleza.
El contacto con la naturaleza permite sintetizar Vitamina D
Es cierto que pasarse tomando el Sol
es perjudicial para la salud. Sin embargo, los médicos recuerdan que, para sintetizar la vitamina D, es
necesario pasar al menos 15
minutos al día en exposición a los rayos solares. De esta
forma, pasar tiempo en la naturaleza, se presenta como una de las mejores
maneras de conseguir la cantidad de esta vitamina necesaria para estar sanos y
fuertes.
De hecho, la vitamina D está asociada
al correcto desarrollo de músculos y huesos, tanto en las fases de crecimiento
como en adultos que tienen que reparar sus tejidos (por ejemplo en personas con
osteoporosis). En otras palabras, pasar tiempo en la naturaleza, en contacto
directo con la luz natural, nos ayuda a tener un cuerpo más joven y resistente
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