SOCIEDAD Y CULTURA - BUENOS AIRES - ARGENTINA *Editor responsable: Miguel Angel Figueiras Gimenez.
SOCIEDAD Y CULTURA
viernes, 5 de septiembre de 2025
EL DATO: El Sr. Santiago Kenny siembra en Entre Ríos, decidió incorporar el ARROZ para diversificar.
En el
paraje Las Toscas, sobre la Ruta Provincial 1, entre La Paz y San José de
Feliciano, está la estancia La Domi. Allí, a escasos kilómetros de la línea que
divide Entre Ríos de Corrientes, Santiago Kenny lleva adelante un planteo
productivo agrícola de gran magnitud donde siembra más de 4 mil hectáreas de
los cultivos tradicionales: Soja, trigo, maíz.
Sin embargo, por razones de
sustentabilidad, diversidad y ubicación geográfica, Santiago decidió incorporar
el arroz al planteo, y hoy está produciendo en más de 200 hectáreas, con todos
los cañones apuntados a duplicar ese número.
La particularidad del planteo de
La Domi, es que al arroz que siembran, no lo riegan con agua de un curso
natural como puede ser un río, sino que deben inexorablemente acumular agua de
lluvias en represas artificiales construidas, y luego administrar ese caudal de
agua para inundar el cultivo cuando lo requiere. Actualmente tienen un embalse
para abastecer a las 230 hectáreas actualmente destinadas al arroz, pero están
terminando de construir la segunda represa, para llegar a las 400 hectáreas, y
redondear una rotación de más de 600.
Para
explicar este panorama Santiago comienza hablando de la zona y las
particularidades productivas. De acuerdo al agrónomo –que también forma parte
del grupo CREA Litoral Sur-, esa zona es tradicionalmente mixta, de conviven la
agricultura con la ganadería, y que no es habitual encontrar un planteo 100%
agrícola.
“Somos agrícolas en esta zona. Es
una novedad porque los campos acá suelen ser mixtos. Nosotros nos volcamos por
vocación a la agricultura, y dentro de eso hacemos los cultivos tradicionales
que uno conoce, maíz, trigo, soja, y tenemos la particularidad de agregar
arroz”, explica el experto.
La razón detrás de la
incorporación del arroz al dibujo productivo está en la diversificación:
“Nosotros agregamos el arroz para diversificar. Cuanta más cantidad de
productos tengamos, nos hace un poquito más sustentables en términos de
negocio. El arroz está porque es el cultivo que más natural se encuentra, que
está más cómodo en esta latitud. Estamos muy cerquita del límite con
Corrientes, que a nivel país, es una zona muy productiva de arroz”.
Empezó mi
suegro hace alrededor de 30 años. Al principio se hizo la represa y el arroz no
se hacía por administración. No lo hacía la empresa productora, sino que se lo
alquilaba a arroceros, que eran los que lo hacían. El cultivo del arroz es muy
cultural. Ser arrocero es algo bastante particular. Me incorporé yo hace
más de 20 años y y ahí decidimos tomar las riendas del arroz e
incorporarlo dentro de los negocios de la empresa como producción propia”.
Para Kenny, el arroz no es un
cultivo aislado. Forma parte de un sistema productivo donde hay una rotación
que soporta al arroz y a los demás cultivos.
El productor hace hincapié en que
la eficiencia del sistema depende, antes que nada, del diseño previo, y
obviamente del agua. Al arroz es necesario mantenerlo inundado desde el período
de macollaje hasta los momentos previos a la cosecha. “Es clave el sistema que
uno usa de arroz, de riego, la parte de diseño de la chacra. La preparación
previa del cultivo es lo más importante. ¿Cómo van a ir las taipas? ¿Cuál es la
técnica donde uno decide dónde va la disposición de las taipas? Eso es clave”,
subraya.
“Nuestra fuente de agua es, a diferencia de otros cursos de agua
permanente, como puede ser un arroyo o un río donde fluye agua de forma
permanente, el embalse. Tuvimos la particularidad de aprovechar la topografía
del campo para en algún lugar determinado almacenar agua”, explica.
Universidad Nacional del Oeste, NUEVA CARRERA/2025: Ingeniería en Energía.
Próximas Inscripciones Octubre
2025 para ingresar al Ciclo Lectivo 2026
Título: Ingeniero/a en Energía
Duración de la carrera: 5
años (carga horaria total: 4168 hs.)
Descripción de la carrera: Ubicación
en la estructura: La carrera de Ingeniería en Energía de la Universidad
Nacional del Oeste depende de la Escuela de Ingeniería y se relaciona con los
Departamentos de Ingeniería, Química, Ciencias Exactas, Informática, Economía,
Contabilidad, Ciencias Sociales y Humanidades, que tienen la responsabilidad de
proveer los equipos docentes para la atención de los Espacios Curriculares.
FUNDAMENTACIÓN
Se requiere de la energía para abastecer hogares, escuelas, hospitales,
para mover los procesos en las industrias, procesar los alimentos, transportar
cargas y pasajeros, entre otras muchas aplicaciones. La energía es el insumo
motriz para el desarrollo y es un factor clave para promover una mayor calidad
de vida de la humanidad. Para ello se debe localizar y asignar los recursos
naturales de los cuales se obtiene la energía. Es fundamental conocer los
métodos más eficientes para convertirlos de fuente primaria a secundaria, a
través de los centros de transformación y su disposición para el consumo final,
siendo conscientes de los impactos generados por la exploración y explotación
de los mismos y el uso de la energía, con el fin de garantizar la
sostenibilidad del medio ambiente.
El conocimiento e interpretación de la matriz energética nacional, una planificación
energética eficiente, una utilización racional de la energía y un
aprovechamiento planificado de los recursos disponibles requiere de una
formación multidisciplinaria, por ese motivo, el diseño de la carrera de
Ingeniería en Energía, que presenta la Universidad Nacional del Oeste, está
basado en conocimientos de ingeniería eléctrica, química, en petróleo,
ambiental, incluyendo aspectos económicos y de legislación, entre otros.
OBJETIVOS DE LA CARRERA
Persigue como objetivos:
Desarrollar una formación académica y científica en temas energéticos, ligada a
la excelencia, confiriéndoles a los graduados una fuerte identidad, egresando
profesionales dinámicos y creativos, con una sólida formación en ciencias
básicas y tecnologías comunes a las ingenierías de procesos, adquirida durante
el ciclo inicial, como así también en las tecnologías del ciclo superior,
específicas de la carrera.
Ocupar una posición académica de referencia en el área de la Ingeniería en
Energía, fundamentada en la calidad e idoneidad de sus egresados.
Proporcionar una formación académica interdisciplinaria en el área de la
energía, que forme profesionales capaces de abordar la temática a partir de una
visión integral de la problemática energética.
Formar profesionales que posean la capacidad de utilizar de manera racional los
recursos naturales, analizar situaciones, buscar alternativas, proponer
soluciones y ejecutar proyectos.
Participar en la transferencia de tecnología con industrias u organismos
vinculados a la temática.
Preparar profesionales capacitados para ejercer un liderazgo profesional basado
no sólo en la formación técnica sino también en principios éticos.
Implementar dentro del marco académico científico y, en cumplimiento del
Proyecto Institucional de la Universidad Nacional del Oeste, no sólo la
formación de profesionales en la especialidad sino también la conformación de
grupos de investigación en la temática.
Plan de Estudios ¿Cómo
me inscribo?
Por consultas, dudas o más
información, contactános.
Homosexualidad ¿Qué dice la neurociencia? “El saber nos hará libres”
Fuente: Centro de
Investigaciones Cerebrales, Universidad Veracruzana/2025- El padre, colérico, le reclama a la
madre el exceso de mimos al hijo y la acusa de fomentar sus gustos afeminados;
ella por su parte, le reprocha la perenne desaprobación que muestra ante todo
lo que su primogénito hace, la rudeza exagerada en el trato y su marcado
desapego. El hijo, que escucha tras la puerta la discusión sobre su
homosexualidad, se pregunta si algo de lo que se dice allí es cierto o es que,
como lo indican sus recuerdos, sus preferencias nacieron con él.
Si la
homosexualidad es una conducta aprendida o no todavía no está claro para la
ciencia. Genaro Coria Ávila, especialista en neurociencia comportamental con
más de diez años de experiencia en la investigación de las preferencias
sexuales, aporta datos al respecto de esta disyuntiva.
“Sabemos que
nuestro cerebro se organiza desde antes de nacer, pero si observáramos este
órgano en un adulto homosexual no podríamos determinar si nació con esa
organización o se reordenó a partir de ciertas experiencias, porque está
comprobado que el cerebro va cambiando a lo largo de nuestra existencia”.
Estudios
realizados tanto en animales como en humanos que presentan preferencias de tipo
homosexual han revelado una organización intermedia del cerebro, es decir, que
no se ordenó completamente ni como macho ni como hembra, sino como una “mezcla”
de ambos.
Esto podría
suceder porque aunque desde el momento de la fecundación queda determinado el
sexo del producto, durante las siete primeras semanas todos los embriones se
desarrollan como hembras y sólo después de este tiempo la expresión cromosómica
determina si se quedan como tal o se desarrollan como machos. Si alguno de los
factores genéticos gonadales no se completa, entonces el cerebro que requería
organizarse para un varón podría quedar al mismo tiempo como el de una mujer.
Preferencias innatas vs conducta aprendida
Hace más de
medio siglo que se habla de las preferencias innatas como un conocimiento
científicamente comprobado, sin embargo, en su laboratorio del Centro de
Investigaciones Cerebrales en la Universidad Veracruzana, Genaro Coria ha
encontrado a partir de su trabajo de experimentación con modelos animales que
dicha predisposición puede variar.
“Bajo una
química cerebral alterada (con dopamina), hemos logrado que un individuo adulto
aprenda a tener una preferencia de tipo homosexual en unas cuantas sesiones, lo
cual comprueba que aunque nacemos con un cerebro organizado de cierta manera,
sólo permanecerá así si las experiencias lo refuerzan”.
Es decir, que
los mecanismos neurales que nos predisponen para elegir a una pareja sexual no
obedecen necesariamente a una organización evolutiva, nuestras preferencias no
siempre están enfocadas a perpetuar nuestros genes, sino también a satisfacer
un deseo inmediato que en etología se conoce como “causas próximas del
comportamiento”. El caso de las preferencias homosexuales es un buen ejemplo de
ello.
Normal o anormal
Hay más de 300
especies de mamíferos acuáticos o terrestres en las que se expresan niveles de
homosexualidad, lo cual nos lleva a preguntarnos, ¿es natural?, ¿o es que hay
un porcentaje de anormalidad en cada especie?
Genaro menciona
que hay distintas teorías evolutivas que tratan de explicar la razón de ser de
los individuos que prefieren al mismo sexo. Una de ellas plantea que la
homosexualidad es buena para una especie porque hay momentos críticos en la
reproducción en los que es mejor tener individuos que no se reproduzcan para
que protejan al resto de la manada.
“Pero las
preferencias sexuales no dependen exclusivamente de las leyes de la evolución.
Un adulto, humano o de otra especie, es el resultado de lo que sus genes
parcialmente le dictaron hacer y lo que sus experiencias terminaron por definir
y por eso es que cada quien tiene preferencias diferentes y una historia
distinta que contar”, apunta Coria Ávila.
¿Qué nos motiva sexualmente?
En su
laboratorio, el investigador confirma que experiencias tan sutiles como hacer
cosquillas a un infante (en este caso una rata de 35-45 días) afectan
directamente su preferencia sexual. “Si en la edad adulta ponemos a dos
individuos, uno con una señal olfativa que recuerda a las cosquillas de la
infancia y otro sin ella, a pesar de que los dos sean buenos prospectos para el
sexo, todas las ratas prefieren a aquel que les recuerda las cosquillas de su infancia”.
Los humanos
también aprendemos a formar patrones de preferencia basados en lo que vivimos
cuando éramos niños y consignamos qué es lo que nos gusta y lo que no. Cuando
llegamos a la edad adulta y es momento de que despleguemos una preferencia entre
varias opciones, resulta que nuestro cerebro no es nuevo en esa decisión, ya
tiene mapas que se formaron prenatalmente, pero también a partir de las
experiencias recompensantes en la infancia y con las primeras experiencias
sexuales.
No obstante,
las motivaciones sexuales no siempre son positivas, también pueden ser
negativas y contribuir al desarrollo de conductas patológicas como la
pedofilia, la necrofilia y una larga lista de conductas sexuales no aceptadas
socialmente.
“En
experimentos realizados con ratas, se ha demostrado que el sexo es capaz de
revertir, incluso, conductas genéticamente programadas cuando el cerebro
aprende a asociar estímulos que innatamente resultan aversivos con sensaciones
positivas y reforzantes”, señala el investigador.
Para
ejemplificar lo anterior, Genaro hace mención de un experimento que su profesor
en la Universidad de Concordia (Canadá), Jim Pfaus, realizó con ratas macho,
cuyos primeros encuentros sexuales fueron con hembras impregnadas ligeramente
con olor a cadaverina (sustancia producida por la carne en descomposición) y
que aprendieron a asociar este estímulo olfativo con sensaciones
recompensantes.
“Las ratas de
manera natural le tienen aversión a la cadaverina, ya que supone un gran riesgo
de infección; sin embargo, las ratas expuestas a este olor en sus primeros
encuentros sexuales aprendieron a preferir a las hembras que tenían este aroma
e ignorar a las que no lo tenían”.
De ninguna
manera se puede decir que los resultados de éste u otros experimentos se puedan
extrapolar en humanos, aclara Genaro, “sin embargo, nos proveen de datos que
contribuyen al entendimiento de las bases neurales de la motivación sexual, un
conocimiento imprescindible en una especie como la nuestra, siempre dispuesta a
ejercer su sexualidad no sólo como medio de reproducción, sino también como una
forma de relacionarse y comunicarse”, concluyó.