Cada 24 de agosto en Argentina se celebra el Día del Lector
y la Lectora, en conmemoración al escritor Jorge Luis Borges, quien nació un
día como hoy pero de 1899 en Buenos Aires.
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En el 2012, la Ley Nacional 26.754 instituyó que el 24 de agosto de cada año se celebre el Día del Lector, en conmemoración y homenaje al natalicio del escritor,
poeta y ensayista argentino Jorge Luis Borges, considerado una figura clave de la literatura en habla
hispana y universal.
Además de
reconocer la obra y trayectoria de Borges, en este día también se celebra la práctica de la lectura. La ley tiene el objetivo de “promover la lectura y la democracia a través de la realización en
dicha fecha de actos de divulgación de las letras y de reconocimiento a la
obra y trayectoria de la máxima figura de la literatura nacional”.
En honor a Jorge Luis Borges
Jorge Francisco Isidoro Luis
Borges nació el 24 de agosto de 1899 en Buenos Aires, y murió el 14
de junio de 1986 en Ginebra, Suiza, habiendo dejado un importantísimo legado
por sus innumerables cuentos,
ensayos, poemas y hasta guiones de cine. También se desempeñó como profesor,
traductor y bibliotecario.
Su
trayectoria lo convirtió en un referente no
solamente de la literatura argentina, sino de la habla hispana y universal. Aunque hoy destacan “El Aleph” y “Ficciones” como sus obras de
mayor renombre, todos sus escritos han
alcanzado grandes niveles de popularidad.
Su
labor está marcada por los conceptos de la posmodernidad, la memoria, la
eternidad y la metaficción, estrechamente vinculados a la literatura filosófica. Además, los expertos aseguran que su
trabajo fue el que impuso y dio origen al realismo
mágico en la literatura hispanoamericana del siglo XX.
Pasó sus últimos días viajando por el mundo al lado de su esposa, la
escritora María
Kodama, quien falleció en marzo de este año a los 86 años. También a los 86 años, pero en 1986, murió Jorge
Luis Borges sin haber tenido hijos.
Ezequiel
Martínez, director general de la Fundación El Libro, destacó durante la
presentación el valor de esta idea, gestada en pandemia por un grupo de
editores, que pudo concretarse gracias a que Ignacio Iraola, presidente de
la Comisión de Cultura e Innovación de la FEL, pensó en la entidad para
llevarla a cabo.
Iraola
contó cómo empezó todo: “Es una idea de cuatro personas, Carlos Díaz, Víctor
Malumián y Hernán Rosso. Nos empezamos a reunir en pandemia por zoom cuando
notábamos que lo único que se veía era Netflix. Queríamos ver de qué manera
'poner de moda' los libros. Un poco clonar aquella antigua campaña del vino
industria nacional. El libro tiene un poder enorme”, puntualiza. Al grupo
inicial se sumaron Florencia Ure, Aurelio Narvaja y Raquel Robles.
En
uno de los videos, Fito Páez dice: “No imagino un mundo sin libros”. “Leo
porque es la posibilidad de entrar en mundos ajenos”, comenta Tute. “Cuando leo
un libro me conecto conmigo”, suma Bebe Contempomi. “Es lo único que te deja
algo”, opina Julia Mengolini.
Por
el efecto bola de nieve de las redes, estiman que el alcance real de la
campaña será de entre 6 y 8 millones de personas.
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