En
la primera mitad de 2024, Europa ha alcanzado un hito histórico: más del 50% de
la electricidad generada proviene de fuentes renovables. Según la asociación
Eurelectric, este logro subraya el ritmo acelerado con el que se está
descarbonizando el continente. Además, se ha registrado que el 74% de la
electricidad total provino de «fuentes de energía renovables y de bajo
carbono», lo que incluye la energía nuclear. Esta cifra representa un notable
incremento con respecto al 68% registrado en 2023.
Kristian Ruby, secretario general de Eurelectric,
destacó que estos resultados evidencian que los esfuerzos de descarbonización
del sector eléctrico están años por delante de otros sectores industriales. Sin
embargo, Eurelectric advirtió que la demanda de electricidad no ha mostrado un
comportamiento tan positivo. Entre las causas identificadas están la deslocalización
de la industria, el aumento de las temperaturas, las políticas de ahorro
energético y el crecimiento económico lento. En comparación con el mismo
periodo de 2022, la demanda de electricidad en la Unión Europea (UE) disminuyó
un 5,1% en 2023 y en la primera mitad de 2024, fue un 4,8% menor que hace dos
años.
A pesar de esta caída en la demanda,
Ruby enfatizó que no se deben reducir las inversiones en el sector energético.
Al contrario, Europa debe continuar desarrollando su infraestructura eléctrica
para garantizar una transición energética efectiva.
Alemania
lidera en energía renovable
Alemania, una de las economías más
grandes de Europa, ha logrado que las energías renovables cubran el 58% de su
consumo bruto de electricidad en los primeros seis meses de 2024, según cifras
preliminares del Centro de Energía Solar e Hidrógeno de
Baden-Württemberg (ZSW) y la Asociación Alemana de Industrias
de Energía y Agua (BDEW). El director gerente del ZSW, Frithjof Staiß,
comentó que estos números récord demuestran que es posible lograr un suministro
eléctrico eficiente, confiable y neutro en emisiones de gases de efecto
invernadero para 2035.
No obstante, el camino hacia una
transición energética completa no está exento de desafíos. Kerstin Andreae,
presidenta del BDEW, pidió eliminar las barreras que obstaculizan el desarrollo
de infraestructuras de almacenamiento de energía y la expansión de la red
eléctrica. La implementación de estas mejoras es clave para garantizar un
suministro constante y eficiente de energía renovable.
Además, el Instituto
Fraunhofer informó que el 65% de la electricidad suministrada a la red
pública en Alemania durante el mismo periodo provino de fuentes renovables.
Esta cifra es superior a la presentada por el BDEW y el ZSW, ya que no incluye
la energía generada directamente para la industria, la cual aún depende en gran
medida de combustibles fósiles como el petróleo y el gas.
Según el Instituto Fraunhofer, la
generación de electricidad a partir de combustibles fósiles disminuyó un 15%,
mientras que la producción de electricidad con lignito (carbón marrón) cayó un
25%, aunque sigue siendo la segunda mayor fuente de energía en el país, con un
21% del total. En contraste, el viento fue la principal fuente de generación de
electricidad pública, representando el 34%, seguido por la energía solar con un
15%.
Objetivos
futuros y desafíos
Alemania se ha propuesto alcanzar un
80% de energía renovable en su consumo bruto de electricidad para 2030, con el
viento como la fuente de energía más relevante. A medida que sectores como el
transporte y la calefacción se electrifican cada vez más, se espera que la
demanda total de electricidad aumente en los próximos años, lo que contribuirá
a una mayor reducción del uso de combustibles fósiles. Sin embargo, esto no
necesariamente se traducirá en un aumento significativo de la demanda
energética total, ya que las aplicaciones eléctricas suelen tener menores
pérdidas de conversión en comparación con los sistemas basados en combustibles
fósiles.
El
avance de Europa y Alemania hacia un futuro más sostenible está marcado por la
necesidad de seguir invirtiendo en tecnologías limpias, infraestructuras de
almacenamiento y redes eléctricas. Aunque el camino hacia la descarbonización
completa presenta retos, los avances logrados en 2024 son un indicio claro de
que el continente está avanzando en la dirección correcta.
El año 2024 ha sido testigo de
importantes avances en la transición energética en Europa. Con más del 50% de
su electricidad proveniente de fuentes renovables, el continente está
demostrando que una matriz energética más limpia y sostenible no solo es
posible, sino que es alcanzable en el corto plazo. Países como Alemania están
liderando el camino, con cifras impresionantes y metas ambiciosas para la
próxima década. Sin embargo, la caída en la demanda eléctrica y los desafíos en
infraestructura energética destacan la importancia de seguir invirtiendo en
soluciones que permitan una transición fluida y equitativa para todos los
sectores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario