El perro
más fuerte, una raza donde los machos adultos pueden superar fácilmente los 100
kg. Aunque si lo que analizamos es la potencia de mordida, le superarían, por ejemplo, los Rottweiler, uno de los perros guardianes por antonomasia. Pero sobre ambas razas, en cuestión de
fuerza, manda el prácticamente desconocido Kangal Turco, un perro originario de la región central
de la Turquía asiática y que reúne las mejores características de
los mastines ingleses y de los rottweiler.
El perro más
fuerte del mundo es el Kangal Turco. Al menos si atendemos al equilibrio entre fuerza de mordida
y tamaño o fuerza física. Si bien, como comentamos más arriba, no es el más
grande o poderoso en lo que a peso y talla se refiere, sí que es el perro que
conjuga de forma más potente un tamaño importante con la mayor potencia de
mordida, según los propios expertos. No en vano es un perro de pastoreo acostumbrado a enfrentarse
a grandes predadores como lobos o incluso osos.
Origen del
Kangal Turco:
El Kangal
Turco es
una de las razas caninas más antiguas, pues se considera que sus orígenes están, junto al
mastín inglés, en
el moloso de Asiria y en el moloso romano, dos especies de perros hoy
desaparecidas y que en
su momento fueron utilizadas como armas de guerra por los ejércitos de ambas
civilizaciones y también como
perros cuidadores de ganado, labor
fundamental en una zona donde abundan los lobos y los chacales. Algunas teorías
apuntan que la raza ya existía hace 6.000 años.
La nota
más característica del Kangal Turco es la máscara negra que cubre su
rostro y que está presente en todos los ejemplares sea cual sea el color
de su doble capa de pelo, generalmente grisáceo o terroso, y que precisa
ciertos cuidados en el cepillado para conseguir que cumpla su labor
protectora a la perfección.
Se
trata de perros que a pesar de su tamaño se muestran equilibrados, serenos y
tranquilos, muy
familiares y protectores con el grupo humano al que pertenecen, pudiendo pesar los machos entre 48 y 70
kg y las
hembras entre 40 y 50 kg. La
alzada de un Kangal Turco puede llegar a superar los 80 centímetros en un macho adulto, con
una esperanza
de vida que suele oscilar entre los 10 y 14 años.
Son perros
tranquilos, valientes, y que pueden
ser buenos perros guardianes de familia. Mostrándose cariñosos y protectores con los niños.
Pero su carácter, muy seguro y tendente al liderazgo de la manada, causa que no
sean aptos para cualquier persona. El Kangal requiere un adiestramiento y sociabilización
correctos desde cachorro.
Y, por tanto, no es un perro que pueda adiestrar alguien inexperto.
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