Un empresario
miembro del Consorcio ABC explica de qué se trata el protocolo firmado con el
gigante asiático. A partir de este domingo, los productos argentinos se
expondrán en una gigantesca feria en Shanghái.
Más allá del bajón de precios que impacta en la generación de
divisas y en el interés del negocio, China no deja
de ser el mercado más importante para la cadena frigorífica argentina:
representa más del 70% de los volumenes exportados de carne bovina.
Por eso, el nuevo protocolo firmado con el gigante
asiático y que permitirá sumar los envíos de menudencias, genera
expectativas en el sector.
Será uno de los temas que se abordará en
profundidad a partir de este domingo 5, y hasta el próximo 10 de noviembre, en
la 6° edición de la gigantesca feria China
International Import Expo (CIIE) en Shanghái, donde el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina
(IPCVA) participará junto con 19 empresas
exportadoras.
LAS MENUDENCIAS, EL NEGOCIO QUE QUIERE CRECER
Todo esto ocurrirá luego de lo que fue la participación
de Argentina en la feria internacional de Anuga,
donde los principales exportadores de carne bovina del país expusieron en
Alemania las bondades de la carne argentina y buscaron sellar nuevas alianzas
comerciales.
Ahora, la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca
anunció recientemente el acuerdo con
China para que puedan ingresar a ese país parte de las menudencias resultantes
de la faena, y el CEO de frigorífico Gorina y vicepresidente
del Consorcio de Exportadores de Carnes Argentinas ABC, Carlos Riusech, explicó
los alcances reales del acuerdo.
En concreto, habilita a la posibilidad de comercializar
productos como:
·
Corazón
·
Pulmón
·
Rabo
·
Diafragmas
·
Arterias
·
Tráqueas
·
Rabo
·
Grasa corporal
·
Lengua
·
Hígado
·
Riñones
·
Pene
·
Testículos
“Yo
creo que hay que marcar un gran trabajo tanto de Senasa como de la
Secretaría de Agricultura. En el caso de la lengua, por temas que están
vinculados con la aftosa y con la vacunación y con todo el tema
sanitario, fue aprobado un tratamiento especial”, expresó Riusech en diálogo
con La Red Rural (AM 910).
Se
trata de un proceso que requerirá de una cocción de la lengua a lo
largo de 30 minutos, y a 70°.
Para el caso de hígado,
riñón, pene y testículo la aprobación se hizo únicamente
para “campos declarados libres de brucelosis por SENASA”.
En tanto, contó que el gran desafío que ahora tiene
Argentina, al igual que Uruguay, es en relación a los subproductos que se
extraen del estómago. Se trata de mondongo, el librillo o el cuajo, que tienen
que ver con el tracto digestivo de la vaca. Esos
productos aún no fueron aprobados y la industria espera que tengan luz verde
para el año que viene.
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