En esta
oportunidad la obra representa los valores humanos que hacen que la vida en
comunidad tenga un verdadero significado.
Hoy veremos plasmado
en MURALES el compañerismo, el vigor y
el heroísmo de los jóvenes merlenses cuando nuestro distrito fue presa
de un tornado. El Municipio de Merlo através de la Secretaria de Juventud homenajea
ese valor humano sin el que seria casi imposible vivir, “la solidaridad”
Recordemos
el prehistórico nacimiento de la pintura que hoy conocemos como Mural: La primera pintura Mural de la historia fue la rupestre, se ejecutó sobre las paredes de roca
de las cuevas del Paleolítico. Usaban pigmentos naturales con aglutinantes como
la resina. La pintura sobre muros y paredes
dominó durante la antigüedad y
durante la época románica.
Decayó en el gótico, debido
a que las paredes se sustituyeron por vidrieras, con lo que había menos superficie en la que
pintar; esto determinó también el auge de la pintura sobre tabla.
Durante el Renacimiento
se produjeron grandes murales, como los frescos realizados por Rafael en las Estancias del
Vaticano y la obra de él en la Capilla Sixtina. Posteriormente, se ha
limitado a las paredes de los edificios y los techos, destacando las grandes
decoraciones del Barroco y el Rococó, que, combinadas con relieves de estuco, daban lugar a creaciones ilusionistas
impresionantes.
La pintura mural no se ha llegado a abandonar nunca, como puede
verse en la obra de los muralistas de Hispanoamérica. Los más famosos fueron Diego Rivera, David Alfaro
Siqueiros y José Clemente
Orozco en México, Pedro Nel Gómez en Colombia, y Teodoro Núñez Ureta
en Perú.
En el hoy, el graffiti, en sus vertientes más
artísticas y monumentales, ya es considerado como una forma contemporánea y
urbana de pintura mural.
Es digno destacar
que las obras están siendo realizadas por los artistas merlenses Marcela Ahumada
y Leandro Ibalo, de reconocida trayectoria. Para ser visitadas las obras están situadas
en el Anfiteatro de la Juventud, predio junto a la Casa de la Cultura , Av. Calle Real y
Padre Espinal.
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