El jueves 11 de enero, el Circo Medruno de Roma acogerá a unos espectadores muy especiales. Ni más ni menos que a 2.100 pobres de Roma invitados por el mismo Papa Francisco a través de la Limosnería Apostólica, encargada de la caridad del Pontífice.
En un comunicado, el Vaticano explica que asistirán a la función de la tarde “pobres, sin techo, prófugos, un grupo de encarcelados, las personas y familias más necesitadas, junto a sus voluntarios”.
El espectáculo, al que se le ha dado el nombre especial de “Circo Solidaridad”, ha atendido así a las palabras del Papa Francisco durante una Audiencia General en la que afirmó que “la gente que hace espectáculo en el circo crea belleza, son creadores de belleza, y esto hace bien al alma. ¡Cuánta necesidad tenemos de belleza!”.
La Limosnería asegura que esta iniciativa será una ayuda especial para “nuestros hermanos más pobres” que así contarán con una razón más para “superar las asperezas y las dificultades de la vida que tantas veces parecen demasiado grandes e insuperables”.
Además, en el exterior de la carpa del Circo estará disponible un servicio médico-sanitario con médicos y enfermeras voluntarios y una ambulancia para prestarles ayuda si así lo desean.
No es la primera vez que Francisco patrocina una iniciativa semejante. El 15 de enero de 2016, 2.000 pobres fueron también invitados a participar como espectadores en un espectáculo circense, aquella vez en el Rony Roller Circus.
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