El arbusto de coca es originario de América del Sur, y sus hojas son muy utilizadas en el norte argentino, en Perú, Ecuador y Colombia. Las mismas pueden tener diversos usos: masticar, tomar en filtrantes, y consumirla en forma de harina. En todas sus formas tiene propiedades beneficiosas para la salud si se consume de moderadamente, como todo.
La coca, como el te y el café, es una planta alcaloide, y uno de los alcaloides es la cocaína. A pesar de ello, la cantidad de cocaína en las hojas no supera el 1%, y no tiene que ver con los devastadores efectos que produce al ser procesada como droga. El alcaloide mezclado con la saliva se transforma en ecgonina, una sustancia que contribuye a quemar grasas acumuladas en el hígado.
En 1975, una investigación realizada por la universidad de Harvard, titulada “Valor nutricional de la hoja de coca”, probó que la masticación diaria de 60 gramos de coca colman las necesidades de calcio. Por otro lado, el mate de coca constituye un buen complemento en una dieta diaria por su aporte de vitaminas y determinado oligoelementos.
Los mismos estudios sostienen que de 100 gramos de coca, se pueden obtener dos gramos de potasio, que contribuyen al equilibrio del corazón. Por otro lado, la harina de coca funciona como alimento y “medicina”, y aclaran los especialistas que su consumo es seguro, pues no genera dependencia ni toxicidad. Esta harina de color verde no solo es rica en calcio, sino también en proteína vegetal. Mientras 100 gramos de quinoa te aportan 14 gramos de proteína, la coca te aporta 19,9 gramos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario