El Parque Nacional Iguazú, declarado Patrimonio Natural de la Humanidad en 1984, recibirá este año más de un millón y medio de visitantes, con un promedio de 3500 por día, un 4% más que en 2017, es decir, un récord desde su creación.
Un 55% de visitantes son nacionales y un 45% del exterior, de los cuales un alto porcentaje son brasileños, y el resto, mayoritariamente provienen de distintos países de Europa”, especificó.
Adelantó que está en la mira construir una nueva estación para el Tren de la Selva, el cual permitirá que los visitantes puedan acceder en forma directa al Circuito Inferior.
“Ampliaremos la Estación Central y estamos a punto de recibir dos nuevas locomotoras eléctricas, con las cuales consolidamos nuestra certificación mundial en el cuidado del medio ambiente“, precisó.
Aparte de los nuevos senderos, se estaba analizando crear nuevas atracciones “para satisfacer las necesidades de un público cada vez más numeroso y exigente”.
En el mismo sentido, destacó el Paseo de la Luna, los safaris que se llevan a cabo por la selva y la aventura de transportarse en el gomón hacia las cataratas.
El Paseo de la Luna es una visita nocturna a la Garganta del Diablo durante los días de luna llena.
Son cinco noches al mes en las cuales 360 privilegiados, divididos en grupos de 120 personas, recorren, primero en tren y luego a pie por las pasarelas, el camino que conduce a la Garganta del Diablo, el salto de 82 metros.
En tanto la experiencia de viajar en una embarcación que atraviesa los rápidos del río Iguazú rumbo a las caídas de agua es un paseo que lleva a los aproximadamente 30 ocupantes de la lancha, hacia la base misma del salto San Martín.
Por otra parte, el safari por la selva es un paseo entre la vegetación, utilizando el viejo camino que unía Puerto Esperanza con el antiguo Hotel Cataratas.
Se trata de una travesía que implica un contacto pleno con la naturaleza, que permite apreciar cómo la vegetación se fue recuperando en sí misma luego de la deforestación que redujo la selva natural a un 5% de lo que había en la región hace más de 100 años.
El Parque Nacional Iguazú fue creado en 1934 por la Ley 12.103 con el fin de conservar las 67.620 hectáreas que fueron declaradas Patrimonio Natural de la Humanidad en 1984.
En el año 2011 las Cataratas fueron elegidas como una de las “Siete maravillas naturales del mundo”.
El área asume la tarea de proteger especies en peligro de extinción tales como el yaguareté, el ocelote, la yacutinga y el macuco, que aún encuentran en el Parque Nacional Iguazú las condiciones para su supervivencia.
Además, allí reside una flora autóctona con más de 2000 especies, unas 450 especies de aves, 80 tipos de mamíferos e incontables variedades de insectos.
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