SOCIEDAD Y CULTURA

Revista El Magazín de Merlo, Buenos Aires, Argentina.



viernes, 14 de octubre de 2016

Llego la Esquistosomiasis para quedarse hasta que terminen la vacuna, 240 MILLONES de afectados en el mundo en 78 países.


Es también conocida como “fiebre del caracol”, es una enfermedad parasitaria producida por los caracoles de agua dulce infectados por una de las cinco variedades del parásito Schistosoma. Es encontrada principalmente en climas tropicales y subtropicales, afectando a 240 millones de personas en un máximo de 78 países, con mayor prevalencia en África y ocupando el segundo lugar después de la malaria como la enfermedad parasitaria más común.

Causas de la Esquistosomiasis: La Esquistosomiasis se transmite por el contacto con agua fresca contaminada (lagos, lagunas y ríos) habitadas por caracoles portadores del parásito. La natación, el baño, la pesca y las tareas domésticas, incluso como lavandería y el pastoreo del ganado pueden poner a las personas en riesgo de contraer la enfermedad. Las larvas emergen de los caracoles, nadan en el agua hasta que entran en contacto con el individuo y penetran en la piel. Una vez dentro del cuerpo, se convierten en gusanos machos y hembras apareándose y conviviendo en los vasos sanguíneos durante años.

Algunos huevos de Schistosoma, permanecen atrapados en el cuerpo y migran hacia órganos específicos (en función del tipo de parásito) donde pueden causar daños importantes. La esquistosomiasis urinaria lleva a la cicatrización, el desgarro de la vejiga y los riñones, produciendo cáncer de vejiga. La Esquistosomiasis intestinal se desarrolla lentamente, causando hemorragia abdominal; agrandamiento del hígado, pulmones, bazo y los intestinos. Un indicador importante de la enfermedad es sangre en la orina y/o heces.

Síntomas: Los síntomas de la enfermedad varían en función del tipo de gusano y la localización del parásito en el interior del cuerpo, los cuales incluyen:

*Picazón inicial y erupción en el sitio de la infección.
*Orina frecuente, dolorosa o con sangre.
*Dolor abdominal y diarrea con sangre.
*Anemia.
*Fiebre, escalofríos y dolores musculares.
*Inflamación y cicatrización de la vejiga.
*Inflamación de ganglios linfáticos.
*Agrandamiento del hígado o del bazo.
*Trastornos sanguíneos secundarios en caso de daños en el colon.
*Si la infección persiste, el cáncer de vejiga puede llegar a desarrollarse en algunos casos.
*Los niños con infecciones repetidas pueden desarrollar anemia, desnutrición y problemas de aprendizaje.

Tratamiento para la Esquistosomiasis: Una vacuna contra la esquistosomiasis se encuentra actualmente en las primeras etapas de desarrollo. El praziquantel es la forma primaria de tratamiento. Una sola dosis de praziquantel ha demostrado que reduce la gravedad de los síntomas en los casos de re-infección subsiguiente.

Como método preventivo lo más aconsejable son las campañas de educación como sobre los riesgos de contraer la infección por bañarse en lagos de agua dulce y estanques.


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