El Intendente de MERLO y su cruzada para recuperar los derechos del pueblo. Distrito INACTIVO, Provincia INACTIVA.

Desde su Columna el Dr. R. A. Othacehé reclama: Las consecuencias de la inacción del Gobierno Bonaerense la están pagando los pueblos de los municipios, a raíz de falencias en educación, salud, servicios y obras paralizadas. Pero el abandono del Estado Provincial también es denunciado desde los más altos niveles del ámbito eclesiástico.

 

La falta de compromiso se evidencia en numerosas situaciones negativas para nuestro pueblo: el absurdo recorte a los cupos de comedores infantiles que afecta a más de 20 mil chicos merlenses, la falta de cumplimiento en la entrega de medicamentos a los hospitales para los programas de salud, la paralización de obras de infraestructura fundamentales para el desarrollo urbano, las deficiencias de ABSA, la deuda que mantiene el Gobierno Provincial con nuestro distrito y otras tantas muestras de desidia en todo Buenos Aires.

 

El grado de inactividad ha sido tal que ha repercutido entre las autoridades del ámbito eclesiástico. Sin ir más lejos, el obispo de Lomas de Zamora, Monseñor Lugones, quien realiza tareas sociales en los cordones del conurbano, cuestionó esta semana al gobernador y reconoció que es un tema preocupante. Esto también fue publicado por Clarín en su edición del domingo 26 de junio. Encuentro muy acertada su expresión “En la publicidad de la Provincia de Buenos Aires dice que está activa… pero para mí está anestesiada”.

Nosotros lo venimos detectando y afirmando desde hace mucho tiempo. Es mi responsabilidad como Intendente de un Municipio tan importante como Merlo reclamar por el cumplimiento de lo que le corresponde al Estado Provincial. Las flaquezas de una mala gestión como la que está teniendo el gobernador las paga el pueblo y no tiene por qué.

La Municipalidad de Merlo se ha hecho cargo de múltiples gastos y tareas que le corresponden a la Provincia. Frente a ello, como siempre, estamos trabajando diariamente para salir adelante. Pero la gente sufre las consecuencias. Los gremios, los docentes, los médicos, los vecinos, todos saben cuándo un gobierno no sabe responder ante sus necesidades y sus reclamos.
Es hora de que el Gobernador dé respuestas y soluciones concretas.