Decorar los hogares por Navidad con abetos y pinos naturales, criados en vivero para tal fin, resulta "mucho más recomendable y mejor" que hacerlo con árboles de plástico, creados a partir de materiales no biodegradables, según recomendaron ingenieros forestales y de montes así como organizaciones ecologistas.
Parte de una asociación de ingenieros forestales resaltó que "es mucho mejor, "sin lugar a dudas", recurrir al tradicional pino o abeto.
Pero la estrategia de estos grupos no incluye la tradicional quema de arbolitos el 6 de enero. Para ellos los naturales son mejores porque se pueden, una vez finalizadas las fiestas navideñas, reintroducir la planta en un hábitat adecuado.
Este "final feliz" sólo es posible, a su juicio, si se cumplen unas determinadas pautas que contribuyan a cuidar la buena salud del árbol: regarlo constantemente, mantenerlo alejado de fuentes de calor como calefactores y colocarlo en un rincón de la casa desde el que le llegue luz.
"De esta manera, se evita consumir árboles de plástico, que, aunque están muy extendidos, están compuestos por materiales poco ecológicos y creados a partir de petróleo".
Pero el ambientalista reconoció al menos una ventaja en los arbolitos sintéticos, “si se reutiliza durante muchos años, el perjuicio es menor”.
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