Mientras
miles de líderes políticos, ambientalistas, indígenas y artistas de todo el
mundo se reúnen en la ciudad de Bonn, Alemania, para discutir el futuro del
planeta y evitar que la temperatura global aumente 1,5 °C al finalizar el
siglo, durante la
Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático
(COP23), las malas noticias no paran de llegar.
Se trata del primer análisis anual más detallado sobre los impactos del cambio climático en la salud de millones de personas en todo el mundo. El informe, titulado The Lancet Countdown on Health and Climate Change, tiene en cuenta 40 indicadores clave, que van desde el factor económico hasta el ambiental.
Pérdidas económicas y laborales:
Entre
2000 y 2016, 125 millones de adultos mayores de 65 años estuvieron expuestos a
olas de calor, con impactos en la
salud que van desde el estrés o la insolación, hasta
episodios de insuficiencia cardíaca o riesgo de lesión renal por
deshidratación.
El aumento de las temperaturas también ha dado como resultado una reducción de un 5,3 por ciento en la productividad laboral en personas que realizan trabajos manuales al aire libre en áreas rurales, lo que incide a su vez en los medios de vida de estos individuos, sus familias y sus comunidades.
El valor total de las pérdidas económicas –vinculadas a activos físicos, más que a problemas de salud– como resultado de eventos climáticos extremos se estimó en 129 mil millones de dólares en 2016.
La
tasa de transmisión de algunas enfermedades infecciosas dadas por mosquitos
también ha aumentado. Por
ejemplo, el dengue del mosquito Aedes aegypti ha aumentado en un 9,4 por ciento
desde 1950. Los casos por esta enfermedad se duplican cada década.
Por
otro lado, el número de personas desnutridas en 30 países
de Asia y África ha aumentado de 398
a 422 millones desde 1990. También se
espera que el cambio climático tenga un impacto en la producción de cultivos pues
un aumento de 1 ºC
– aunque parezca poco- en las temperatura global se asocia a una disminución
del 6 por ciento en rendimientos mundiales de trigo y de un 10 por ciento en
granos de arroz.
"Es un desafío, pero aún tenemos la oportunidad de convertir lo que hoy es una emergencia médica en los mayores avances para la salud pública de este siglo", declara el profesor Anthony Costello, copresidente de The Lancet Countdown y director de salud materna, neonatal, infantil y adolescente dela Organización Mundial de la Salud (OMS).
"Esperamos un cambio radical de los gobiernos para hacer frente a los impactos del cambio climático", continúa Costello. "Los beneficios económicos y para la salud serían enormes. El costo de la inacción se contabilizará en pérdidas de vidas que se pueden prevenir”.
"Es un desafío, pero aún tenemos la oportunidad de convertir lo que hoy es una emergencia médica en los mayores avances para la salud pública de este siglo", declara el profesor Anthony Costello, copresidente de The Lancet Countdown y director de salud materna, neonatal, infantil y adolescente de
"Esperamos un cambio radical de los gobiernos para hacer frente a los impactos del cambio climático", continúa Costello. "Los beneficios económicos y para la salud serían enormes. El costo de la inacción se contabilizará en pérdidas de vidas que se pueden prevenir”.
Transportes y contaminación del aire:
El
transporte en las ciudades de las economías emergentes sigue estando dominado
por la gasolina y el diésel, mientras que los combustibles no convencionales –biocombustibles y gas natural– y los vehículos
eléctricos están ganando adeptos, sobre todo en Europa y Estados Unidos.
En
2016 el empleo en el sector de las energías renovables llegó a 9,8 millones de
personas, 1 millón más que en el sector de extracción de combustibles fósiles. Sin embargo, la exposición mundial a la
contaminación del aire ha aumentado en un 11,2% desde 1990, y alrededor del 71%
de 2.971 ciudades monitoreadas por la
OMS exceden los niveles recomendados.
Christiana Figueres, presidenta dela Junta Asesora de Alto Nivel de The Lancet Countdown y ex Secretaria Ejecutiva de la Convención Marco
de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, recalca: "El informe
expone el impacto que el cambio climático está teniendo en nuestra salud.
También, que abordar el cambio climático mejora la salud
mundial directa, inequívoca e inmediatamente. Es tan simple como eso. Cuando un
médico nos dice que necesitamos cuidarnos, prestamos atención. Es importante
que los gobiernos hagan lo mismo”.
Christiana Figueres, presidenta de
No hay comentarios:
Publicar un comentario