La ONG Corazones Azules calificó de "tardía" y
"dilatoria" la decisión del Intendente Julio Garro de encargar a la
Secretaría de Transporte de la Municipalidad de La Plata de que estudie la
Tolerancia 0 al alcohol y drogas en los conductores de vehículos.
El titular de
la ONG mostró desconfianza de que se llegue a una decisión final al respecto
"dada la política que Garro ejerce en la materia".
Y recordó:
"Antes de iniciarse el año pasado la fiesta de la cerveza en el predio
municipal del Bosque, pedimos por nota que se realizaran controles de
alcoholemia a los conductores y que se realizara una campaña de concientización
de conductor designado. El resultado fue nulo, no hubo controles ni
campaña. Por eso con este tipo de acciones tenemos cifras récords de muertes en
siniestros viales en relación a la cantidad de habitantes"; resaltó
Perrotta.
El titular de
Corazones Azules fue más allá e instó al intendente a que "Si tiene la
decisión política de bajar los índices de siniestralidad que el Concejo
Deliberante trate ya con carácter de urgencia nuestro proyecto o cualquier otro
similar, pero con igual objetivo".
Y agregó:
"No hace falta ningún estudio previo porque hay estudios internacionales
que indican que una persona alcoholizada o bajo efectos de estupefacientes
tiene 1700% más posibilidades de protagonizar un siniestro vial”.
La situación
vial en la capital de la Provincia es grave y esto se refleja en el lamentable
récord de muertes y heridos y las secuelas que dejan los distintos siniestros
viales que se dan en la calle de la ciudad: 334 muertos viales en cuatro años y
dos meses de mandato del intendente Garro.
En el
articulado del proyecto presentado se establece la “prohibición absoluta” para
manejar a aquellos que tengan una presencia de alcohol en sangre superior a
cero (0) miligramos por litro de sangre y/o que hayan consumido estupefacientes
y/o psicotrópicos.
Por otra
parte, establece multas económicas, secuestro del vehículo y además los
infractores deberán cumplir con un curso obligatorio sobre seguridad y
responsabilidad vial. Y en el caso que los conductores infractores sean
reincidentes tendrán que abonar el doble de la multa inicial.
“Se debe
partir de la premisa que “beber” y conducir” son acciones incompatibles que
atentan contra la propia salud y la de los demás” explicó Perrotta.
“Con este
proyecto buscamos que, al igual que para conductores profesionales los rige el
grado de tolerancia cero para conducir, misma prohibición se debe extender para
todo aquel que se ubica detrás de un volante”, agregó.
La tolerancia
cero en alcohol debe funcionar “no solo como una acción preventiva, sino
también como disuasoria para la población en general”.
Además, la
ONG expresó, en su momento, “su total y enérgico repudio” al proyecto de ley
aprobado en Diputados en 2018, que permitió extender el horario de venta de
bebidas alcohólicas, “por priorizar el comercio y la recaudación impositiva a
costa de poner en peligro la vida y la integridad física de los bonaerenses en
las calles y rutas, al potenciar el ya alto índice de siniestros viales
inducidos por la ingesta de alcohol”.
En otro de
sus artículos establece que los comercios habilitados para el consumo y venta
de bebidas alcohólicas deberán exhibir un cartel informativo que establezca la
prohibición de conducir bajo los efectos del alcohol, cualquier sea su
graduación en sangre. Dicho cartel será provisto por el municipio de manera
gratuita.
Además, la
Secretaria De Convivencia y Control Ciudadano será la encargada de realizar la
señalización preventiva necesaria mediante cartelería, distribuida en los
principales accesos de la ciudad y lugares recreativos, la cual advertirá a los
conductores que “no pueden conducir con un porcentaje de alcohol,
estupefacientes y/o psicotrópicos y/o cualquier otra sustancia que disminuya la
aptitud de conducir”.
Finalmente,
desde la ONG consideran que también “es importante poner en práctica la figura
de Conductor Designado, como herramienta de prevención y concientización
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