SOCIEDAD Y CULTURA

Revista El Magazín de Merlo, Buenos Aires, Argentina.



viernes, 21 de septiembre de 2012


21 de Septiembre:
A partir de hoy derrama su energía vital  y de renacimiento,
la PRIMAVERA, en esta
parte del planeta.

 “Feliz Primavera” y un volver a nacer con la mayor de las felicidades les desea El Magazín de Merlo, a todos los lectores de Argentina y casi 40 países del mundo que nos visitan, aunque en algunos sea invierno.
Rosa porcelana, florece justo en primavera, la rosa madre de esta tiene ya sus 100 años,
la planto la abuela Micaela durante 1912.

 Como iniciadora de nuevos ciclos, la primavera está asociada también a la diosa Afrodita, la deidad del amor, por otra parte los intérpretes de sueños afirman que soñar con la primavera augura acontecimientos felices en la vida y es un buen momento para firmar compromisos. Queda de manifiesto que el alma se sincroniza con el acercamiento del Sol a la Tierra y, junto con el cambio que experimenta la propia Naturaleza, el hombre se siente renacer.
Fruto de primavera, fresco y dulce níspero
Les obsequiamos esta poesía escrita exclusivamente para esta ocasión, con todo nuestro afecto para todas y todos.
En el patio de la poesía Hilary saluda a la primavera desde el columpio
Primavera eterna como el silencio
 


Primavera llegaste finalmente
para agitar el tiempo de mi vida,
esclavo estuve del  gélido invierno
libero tu savia, mi esencia cautiva.

Primavera de amor y flama
viajas en arroyos crepitantes,
recogiendo pistilos por las noches
guiando las estrellas sin cansarte.

Primavera eterna como el silencio
te vi copular esta fragante mañana,
en el vuelo huidizo de los siglos
en los lirios que yacen en mi cama.
 
Primavera de palomas sin nacer
amanecer de aves blancas y escarlata,
vertiente dulce donde nadaban esplendentes
su voz y mi canción,  errantes en la playa.

Primavera sin llanto ni dolor
lo maldito murió en la atesada noche,
mi sueño es un cielo que estalla
devolviendo tu imagen sin reproche.
 
Primavera fresca de golondrinas migratorias
estoy aquí como un vasallo desposeído,
susurrando en el crepúsculo su nombre
vertiendo al espacio, mi ultimo salmo.
 
Primavera que rasgas las sombras
para que mi amor fluya, atenuando la bruma,
en tu naciente sol todo es luminiscencia
llenándome de pureza, vida y  gloria.
 
 




 

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