A menudo se ignora tanto el mecanismo como el
funcionamiento de nuestra voz, así como también sus posibles alteraciones y
la problemática que se manifiesta en el abuso y mal uso de la misma durante
largos períodos. Por eso, el cuidado de la voz implica tomar conciencia
sobre los malos hábitos y poner en práctica las modificaciones de los
mismos mediante ciertas indicaciones. Y en cuanto a la conservación, la
idea es aplicar buenos hábitos y recursos simples, así como también
aprender sobre el correcto uso de la voz”, explicaron Roberta Martínez y
María Roxana Martin, Licenciadas en Fonoaudiología del Hospital
Universitario Austral.
Entre
los factores que perjudican y ponen en riesgo la salud de la voz pudiendo
generar disfonía (alteración ya sea del tono, la intensidad o el timbre) se
cuentan:
-Gritar
-Tener mala postura
-Fumar
-Respirar por la boca
-Hablar en ambientes ruidosos
-Cantar sin una técnica adecuada
Ante
cualquiera de estos síntomas de fatiga vocal es importante recurrir al
especialista, sobre todo si además se percibe falta de aire para terminar
una frase, cansancio al hablar, sensaciones como picazón, ardor e
irritación, dolor o tensión en el cuello, sensación de que la voz pierde
volumen, ronquera y dificultad para recuperar la voz.
“Por
lo general las dudas e inquietudes más frecuentes tienen que ver con la
imposibilidad de saber cuándo la voz está sana. Entonces, le sugerimos a
los pacientes que se hagan algunas preguntas como por ejemplo: ¿sentís
tu voz ronca o áspera?, ¿creés que tu voz se hace más grave?, ¿hablar
representa un esfuerzo?, ¿despejas reiteradamente tu garganta?, ¿sentís con
frecuencia que tu garganta de duele, te pica o hacés esfuerzo para hablar?”,
enumeraron Martín y Martínez.
Estos
consejos que son siempre útiles pero más aún en la víspera del Día Mundial
de la Voz se
enmarcan dentro de la
Salud Vocal, que consiste en la aplicación de algunas
normas básicas para prevenir futuras alteraciones en las cuerdas vocales.
“Es
importante reconocer qué hábitos inadecuados tenemos que puedan afectar
nuestra voz en el habla y también en el canto. Asimismo, hay que poner en
práctica aquellos hábitos que nos hagan desarrollar y enriquecer nuestra
voz para poder aprovecharla al máximo. Esto es fundamental para los adultos
y los niños que utilizan sus voces durante todo el día, todos los días
(cantantes, docentes, profesores, comerciantes, empresarios, etc.) que
tienen grandes exigencias con su voz”, finalizaron las Licenciadas.
Por
último, entre las recomendaciones para cuidar la voz, las licenciadas
enumeraron:
*No Gritar
*Descansar
*Evitar el sedentarismo
*Realizar actividad física
*Hidratación constante
*Hablar suave lento y claro
*Evitar el consumo de tabaco y
alcohol
*Evitar hablar con catarro o ronquera
*Controlar síntomas de reflujo
gastroesofágico
*Evitar ambientes de humo y polvo en
suspensión
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