Las verdades sobre los
mininos: Llego a ser tanta su desgracia que en la edad media se los asociaron
con la brujería y en satanismo. Hoy en día es la mascota favorita de millones. Les
cuento de lo que fuimos capases de inventar en contra de los gatitos.
Las
embarazadas sí pueden tenerlos: Si no lo tiene, no lo
adquiera, no porque sea un peligro, sino porque sus responsabilidades
aumentarán y deberá tener tiempo para su mascota. Si lo tiene, no lo regale ni
lo bote a la calle, solo pídale ayuda a una persona para que limpie la arenera.
No
producen asma: Son casos esporádicos
de alergias, en todo caso, fáciles de controlar.
Sí
sienten dolor: Tienen receptores de
dolor como todo ser vertebrado y vivo, son fuertes y cuando vocalizan por dolor
es porque va más allá de sus fuerzas.
No
siempre caen parados. Poseen 40 huesos más
que el esqueleto del hombre, repartidos entre cola y columna y que les permiten
moverse con libertad y perfección. No deben ser tomados como juguetes para ver
si realmente caen parados. También se caen y se enredan con frecuencia, lo que
da como resultado fracturas y lesiones.
Cruzarse con un gato
negro es de mal agüero: esta superstición surgió en Europa durante la Edad Media ,
especialmente en Inglaterra. No hay nada de malo en ellos, solo hay que amerlos, los que tenemos gatos lo sabemos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario