Agradezco desde mi corazón a Martín Prieto, Director Ejecutivo de Greenpeace por esta carta recibida hoy y que comparto, ¡¡Sumarse a Greenpeace es sumarse a la vida!!

Hola miguel angel,

Todavía recuerdo estas palabras de Noemí Cruz, integrante de Greenpeace que trabaja hace más de 20 años defendiendo el monte y sus habitantes. Ella expresaba así todo su sentimiento cuando en 2014 hicimos posible que se vuelva a cumplir la Ley de Bosques en Salta. Pero nuestro trabajo en la provincia continúa. Hoy, el objetivo es lograr la reforestación de 3 mil hectáreas que fueron ilegalmente desmontadas por uno de los proveedores de Sprite. Sé que no estamos solos, contamos con vos para presionar y conseguir que la naturaleza triunfe una vez más. Por eso, tu apoyo es fundamental. Es difícil enfrentarse a The Coca Cola Company, una empresa con tanta influencia y poder económico. Sin embargo, no podemos permitir que una compañía que dice ser sustentable le compre jugo de limón a la finca La Moraleja S.A., que ya arrasó un área tan grande de bosques nativos. 3 mil hectáreas es una superficie que cuesta dimensionar. Allí donde hubo árboles, ahora hay suelo seco. Las topadoras pasaron quebrando todo a su paso: troncos, raíces, historia. Seguramente, hasta se habrá sentido el ruido de las motosierras. El bosque quedó reducido a cenizas. Es difícil entender que tanta naturaleza haya sido destruida sin razón.  Hoy es una tierra despojada. Depende de nosotros conseguir la reforestación y recuperar lo que nunca debió haberse perdido. Basta de topadoras y fuego, trabajemos para ver renacer el bosque. Si los poderosos avanzan sobre la vegetación y los animales, vos y yo, junto a todos los que formamos Greenpeace, estaremos allí. Y donde ahora hay un paisaje desolador, podrá volver a ganar la vida. Contamos con tu ayuda para lograrlo.  La Ley de Bosques es una realidad, pero vamos por más. Ya presentamos en el Congreso un proyecto de Ley de Régimen Penal de Protección al Bosque Nativo que penaliza a los desmontes e incendios ilegales con penas de 2 a 10 años. No queremos más destrucción. "Los últimos tatús y osos hormigueros del Chaco que andan con crías caminarán hoy en el sotobosque sin saber que están salvados. O tal vez sí lo sepan, porque la vida es una y porque de chica me enseñaron que los árboles viejos transmiten todo lo que sucede a los demás seres. Por eso, sin árboles, el mundo, está condenado a desaparecer¨.  Como dice Noemí: “Somos todos habitantes de un mismo mundo, que soñamos lleno de bosques¨. Gracias por estar junto a nosotros unidos por un mismo sueño. Un abrazo. Martín Prieto Director Ejecutivo