VIVIR del NOPAL, (tunas para nosotros) asombrosas virtudes de un cactus que no tiene aplicación en nuestro país-

 

Las tunas son deliciosas y refrescantes. Debe retirarse la piel con mucho cuidado, y una vez que la pulpa está expuesta, se usan en la preparación de bebidas, mermeladas, gelatinas y otros postres. Por supuesto, las tunas también se consumen frescas o cocidas. Las semillas se tuestan, se muelen y se agregan a comidas. Las pencas también son comestibles. Tras una manipulación cuidadosa, se retiran las espinas y se corta en segmentos para después cocerse a la plancha o hervirse. En realidad, hay muchas formas de preparar nopales; es común agregarlos a tacos, quesadillas y otros platillos típicos de México. 

Las tunas son buenas fuentes de flavonoides, vitamina C, vitamina B, magnesio, calcio, potasio y cobre, además de fibra dietética. Se les atribuye algunas propiedades medicinales, como el alivio de problemas del hígado, anemia, crecimiento del bazo, úlceras gástricas y problemas urinarios. Las flores y los tallos son diuréticos, antiespasmódicos y emolientes, mientras que las flores, astringentes, se usan para reducir sangrados y tratar la diarrea, la colitis y el síndrome del intestino irritable.

 

El nopal es una planta que, aunque muy diferente de otros grupos de árboles como las coníferas o las palmeras, puede confundirse con otras cactáceas. Es una especie perene y suculenta, es decir, no pierde hojas en una estación del año y guarda una gran cantidad de agua en sus tallos. Su estructura consta de varios tallos y ramas formados por unos segmentos planos llamados cladodios o pencas, que pueden ramificarse. Alcanza una altura de entre 3 y 5 metros.

Carece de hojas a lo largo de las pencas. Estas son color verde, ovalados y su superficie cerosa posee espinas rodeadas de una pelusa; estos grupos de espinas son los gloquidios. Las flores crecen solitarias a lo largo de los bordes o en las uniones de las pencas, con varios pétalos que pueden ser amarillos, rojos o blancos. Después de la floración se desarrollan frutos en forma de pera invertida, de colores que van desde el verde claro hasta el rojizo e incluso púrpura. Su piel es ligeramente dura y está cubierta de gloquidios. La carne del interior es dulce, jugosa, gelatinosa y de un color semejante al de la piel, con varias semillas pequeñas.

El género Opuntia es netamente americano, y lo más probable es que Opuntia ficus-indica sea una especie nativa de México, en donde es abundante. El suroeste de Estados Unidos también alberga la planta en estado silvestre. Los nativos del país cultivaron y consumieron tanto las pencas como las tunas durante muchos siglos antes de la incursión europea. Los españoles llevaron la planta primero a España y después al norte de África; en cuestión de tiempo se le introdujo en numerosas regiones áridas del mundo, incluyendo Australia y la cuenca del Mediterráneo. En el presente, el nopal se cultiva con fines comerciales en México, algunas zonas de Estados Unidos, la cuenca mediterránea, el Oriente Medio y el norte de África, pero se encuentra también en algunas partes de Sudamérica, como Argentina.

Crece en zonas áridas y semiáridas casi sin esfuerzo, a pleno sol  y a temperaturas de hasta 50 ºC. Es muy tolerante al viento y, si se le planta en zonas costeras, no tiene ningún problema en crecer. Sin embargo, no se desarrolla muy bien en suelos muy húmedos. REPRODUCCIÓN Y VARIEDADES.

La reproducción sexual del nopal es semejante a la de otras angiospermas. Las flores son hermafroditas y pueden polinizarse a sí mismas (se autopolinizan). Cuentan con un ovario inferior que, a su vez, posee varios óvulos que posteriormente se convierten en semillas. En la primavera y hasta el final del verano, Opuntia ficus-indica florece y ofrece su néctar a colibríes e insectos como las abejas, que se encargan de la polinización. Los frutos maduran de agosto a octubre. Son de maduración lenta.