De lo que son capases las mano creativas del hombre, hoy el increíble TEMPLO de KAILASA.

 

 Fue construido en un solo bloque de piedra tallada, es considerado uno de los templos más impresionantes de la arquitectura rupestre india. 

Es increíble pensar que algunas de las más bellas y mastodónticas construcciones que la historia del arte y la arquitectura nos han regalado, se levantaron, a penas sin medios, hace miles de años. Monumentos como las pirámides de Keops, Kefren y Micerino en Guiza o La Ciudad Perdida de Petra en Jordania, nos hacen pensar en cómo esas antiguas civilizaciones desarrollaron ciertos cálculos y conocimientos arquitectónicos llenos de precisión.

Otro claro ejemplo de belleza milenaria, armonía en las proporciones y técnicas pulidas y exactas, es el Templo de Kailasa que está en la región de Maharashtra (India). Construido en un solo bloque de piedra tallada, es considerado uno de los templos más impresionantes de la arquitectura rupestre india y forma parte de los 34 monasterios y templos que componen el conjunto conocido como las grutas de Ellora.

Estas grutas han sido declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO e incluyen monumentos construidos entre el año 600 y 1000 d.C.; de entre todas las impresionantes estructuras destaca Kailasa. Aunque el origen y la autoría del templo no está clara, los investigadores e historiadores ubican la construcción bajo el reinado Krishna I de Rachtrakuta, quien gobernó desde aproximadamente el año 756 hasta el 773 d.C.

Esta falta de datos fidedignos sobre el origen de la icreíble construcción, ha generado leyendas en torno a ella; según los mitos, un rey enfermó de gravedad, y su reina rezó al dios Shiva para que lo curara a cambio de construir un templo en su nombre y ayunar hasta que se completara la cubierta del templo.

Aunque forma parte de una leyenda que la construcción empezara desde arriba, desde la cubierta, lo cierto es que así se hizo; esta inusual decisión de empezar la casa por el tejado, llevó a que se excavaran 200.000 toneladas de piedra volcánica de la roca.

Con unos tres pisos de altura, las ornamentaciones y las decoraciones varían debido a que se estuvieron añadiéndose durante siglos y cada dinastía aportó su toque.

En sus muros pueden contemplarse diferentes deidades hindúes, con una atención especial a Shiva; aunque en la parte izquierda se muestran a los fieles de Shiva, en los de la derecha se observan devotos de Vishnu.

Kailasa es considerado un ejemplo sobresaliente del arte y la arquitectura de la India y una muestra de que nuestro paso por la tierra también puede ser de una belleza constructiva.