Se trata Melilottus albus, una leguminosa invernal que
aporta nitrógeno, al sistema a partir de la nodulación, y además tiene alto
valor forrajero.
El productor Nicolás
Listello (Foto), de la Chacra Aapresid Suroeste de Chaco, sembró por primera
vez en este ciclo el cultivar “Munay”, de Melilottus
albus, conocido vulgamente como “trébol blanco de olor”.
El “Munay” es
un cultivar que ha sido mejorado para optimizar el valor forrajero de esta especie, pero conservando
las características que hacen a su rusticidad, como su importante desarrollo
radical y su tolerancia a condiciones marginales de producción.
Asimismo,
debido a que es una especie con la capacidad de formar nódulos que capturen nitrógeno atmósferico, también puede asegurar parte
de la provisión del nutriente a los suelos.
Según explica
Listello, “el objetivo de la siembra fue la producción de semilla sobre un lote
de aptitud IV sin fertilizar. Las últimas lluvias se registraron a inicios de
abril, por lo que, si bien el perfil estaba bien cargado a la siembra, el
cultivo se desarrolló en ausencia de precipitaciones”.
A pesar de
que las condiciones de crecimiento de esta especie no fueron óptimas este ciclo
en Chaco, el cultivar promete producir hasta 10.000 kilos
de materia seca por hectárea.
Listello, muy
satisfecho con el resultado de esta prueba, ya anticipa su próximo paso: “Tiene
un crecimiento inicial más rápido que otros cultivares, por lo que creemos
puede ser un competidor hábil contra las malezas, un servicio muy buscado
actualmente”.
Sin embargo,
para que el común de los productores conozcan los beneficios todavía hay que
esperar ya que el nuevo cultivar se encuentra aún en etapas de desarrollo y
sólo fue testeado en la zona central y norte del país.
No hay comentarios:
Publicar un comentario