Los hábitos alimenticios,
la contaminación y el cambio climático figuran como las claves que explican el
crecimiento de alérgicos, una epidemia que afectará a la mitad de la población
en 30 años.
Consejos
para sobrellevar la alergia primaveral
Los síntomas de las alergias de
primavera pueden variar desde leves estornudos y picazón de ojos,
hasta congestión y fatiga similar a la de un resfriado.
Afortunadamente, hay una serie de medidas que puedes tomar para
prevenir las alergias antes de que comience la primavera.
·
Evita mantener las ventanas
de casa abiertas.
·
Usa humidificadores y
aire acondicionado con filtro anti polen.
·
Usa en el coche un filtro
antipolen y evita conducir con la ventana abierta.
·
Evita humo, espray y
productos químicos que pueden irritarte las mucosas.
·
Usa gafas de sol para
proteger los ojos del polen.
·
Evita hacer deporte en
las horas en las que el polen se encuentra más presente en el ambiente, durante
el amanecer y atardecer.
·
El ejercicio en un espacio
cerrado te evitará la congestión y te sentirás más fatigado y menos
productivo.
·
No tomes medicinas por
tu cuenta, es mejor que vayas al médico para dar con el tratamiento adecuado.
“Las alergias son la gran epidemia del siglo XXI”, explica
Joaquín Sastre, presidente de la Sociedad
Española de Alergología. Una epidemia que seguirá creciendo en los
próximos años. “En los países desarrollados los alérgicos serán el 50% de la
población en 2050”, añade. Un futuro poco alentador que ha ido
creciendo en los últimos años. “Entre el 20 y 25% de la población tiene alguna
enfermedad alérgica más o menos grave hoy en día.
Pero por qué ha crecido el número de
alérgicos. “Hay factores ambientales, unos más conocidos que otros, que han
modificado la respuesta del sistema inmune ante cosas a las habitualmente no
respondía y que ahora lo hace. El sistema inmune siempre responde ante
cosas que considera patógenas, pero no ante otras cosas que lo rodean”, explica
el doctor.
Cambios
en el sistema inmune
El cuerpo reacciona ante el entorno,
ante los cambios que vamos introduciendo de forma voluntaria o accidental en
nuestras vidas. Esos cambios son hábitos, nuevos alimentos y condiciones. “Todo
lo que nos rodea hace que el sistema inmune haya cambiado y responda a cosas
que antes no hacía como ácaros del polvo, el polen, los alimentos”, relata este
reputado experto.
Todos esos cambios se han notado en los más pequeños, en esa generación
que llegará al 50% de alérgicos en 30 años. “La forma en que
alimentamos a los bebés tiene importancia”, aclara Sastre. “Hemos constatado en nuestros estudios
que en los últimos diez años se ha incrementado la alegría a los alimentos,
sobre todo en los niños más pequeños y la alergia a los aeroalérgenos, a lo que
se respira. Ha habido un gran incremento de sensibilización a pólenes, sobre
todo a los de las gramíneas, el olivo o la arizónica. Eso se ha disparado”,
añade.
Alérgicos
más jóvenes
Si uno de cada cuatro españoles es
alérgico, en los niños pequeños ese porcentaje es mayor. “Las alergias empiezan
en niños muy jóvenes, aunque algunas desaparecen en la adolescencia”, explica
Sastre. “En la primera infancia, los cuatro primeros años, dominan las
alergias a los alimentos, sobre todo leche y huevo y empieza a los frutos
secos”, apunta el doctor. “Luego se incorporan pólenes y ácaros, empiezan las
dermatitis atópicas. También pueden aparecer a los 40 años, pero no es lo
habitual”, añade.
Algunas de estas alergias se van apagando con la edad, pero otras te
acompañan toda la vida, incluso pueden aparecer otras. “En la edad
adulta se ven alergias a los medicamentos, por ejemplo”, explica el doctor Sastre.
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